31 ago 2014

De la sidra a la queimada

INTRODUCCIÓN.
Este relato son las vivencias ocurridas durante el verano de 2014,  un viaje realizado con mi esposa y cuñados, por Oviedo y parte de Galicia.
No es todo lo que pasó pero intento acercarme a la realidad, siempre vista desde mi óptica.

De la sidra a la queimada.
Capítulo 1 La sidrada
Salida 16 de julio de 2014, en otros años anteriores también ha coincidido el día de salida veraniega, esta vez el conductor era yo, nos encaminamos ruta hacia Oviedo, con las paradas respectivas en carretera, desayuno, paradas reglamentarias y comida.
Lo que mas me llamó la atención de esta parada comensal es el lugar, no había ni un lugar donde sentarse, materialmente comí de pie el bocadillo de rigor casero y la cerveza sin alcohol aneverada; el resto de la ruta era camino, carretera y mas de lo mismo con conversaciones típicas ( si peaje o no peaje, porque en España si viajas te resulta caro, primero por la gasolina y segundo por los peajes) pero hay que aprovechar el momento de esperanza de todo un año sin salir.
Entre pitos y flautas llegamos a Oviedo, el Tomtom me iba indicando el camino, pero llega un momento me dice "ha llegado a su destino", y... esto parece un  polideportivo, avanzamos un poco para preguntar donde se encontraba el hotel Ayre de Oviedo, (cateto de mi era ese monumento arquitectónico de Calatrava, no conocía ese tipo de construcción....y pensar que me iba a meter alli dentro...!madre mía!.)
Era importante salir y visitar la ciudad, lo novedoso estreno máquina de fotos, mejor dicho reestreno y mi Yoli fotos por doquier, al final del verano no exagero pero está por encima de las dos mil fotos.
Llegamos a la zona de las sidrerias, movida de gente y eso que estamos en crisis, pero el verano no perdona, a ambos lados de la calle bares y restaurantes de personas tomando y bebiendo sidra. Me llamó la atención la forma de escanciar, camarero brazo en alto con una botella y el otro con vaso en la parte inferior, desde lo alto, con tino cae la sidra pero solo un culín.
El primer problema surgió a la hora de elección del lugar nos metimos en un bar donde apenas había gente, bastantes anticuado nos sentamos allí y empezamos con la ceremonia del escanciado, aquello para las personas no acostumbradas le resulta un poco irrisorio porque primero bebes
un culín de sidra y nada mas escanciada, si lo dejas tiempo no tiene el mismo sabor, bebes rápido y no cuando quieres sino cuando se acerca el camarero a escanciar, cayeron tres botellas, algunas tapas sobre todo de conserva, descubrimos una buena ventresca de atún.
Al final del día volvimos al hotel no sin pasar cerca del teatro Campoamor
donde se entrega los premios Príncipe de Asturias, allí nuestra imaginación volaba sobre el gentío que habría en esas fechas.

Capítulo 2 La excelencia del románico
El segundo día de Oviedo, desayuno en los alrededores del hotel, regular, cogemos nuestro vehículo para  ver los dos grandes monumentos del románico Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, segunda vez que los visito, no me canso de disfrutar de la belleza de aquellos monumentos, el paraje de su alrededor,  hacen que sean para mi uno de los lugares mas hermosos  visitados. Allí se respira paz, tranquilidad, una sensación indescriptible, conozco lugares pero como este lo pondría entre los más destacados.
A media mañana y a bote pronto decidimos encaminarnos hacia Avilés, bonita y pequeña ciudad con sus museo e iglesias, paseo por el casco histórico. Nos sentamos en la plaza central para tomar una cerveza, anteriormente realizamos  la visita gratuita al museo, me llamó la atención su historia y las fases de la construcción de su iglesia.
Vuelta a Oviedo, comida típica en el Rincón Asturiano,  un menú turístico, calidad precio se queda en un bien, el pescado estaba fatal, comida a gogó solo el primer plaro se salvó.
Descanso en el hotel , el tiempo nos estaba respetando para después realizar una nueva salida nocturna, volver al lugar de la noche anterior, esta vez fuimos cazados por un señor que nos ofrecía sentarnos,  viéramos el menú, revuelto de setas y quesos de la zona, comparado con el mediodía calidad precio lo calificaría con un bien. Me llamó la atención el paseo por sus calles peatonales y su iluminación escasa en los monumentos

Capítulo 3 Playa de las catedrales


Salida, desayuno desde Oviedo camino a A Coruña, primera parada en Luarca con parking gratis a la entrada del pueblo, visita andando por su puerto y los alrededores.
Observamos las pequeñas playas y los destrozos de la tormenta invernal en el muelle.
Nos dirigimos después, hacia la Playa de las Catedrales, en principio no había mucha gente, pensábamos en comer fuera y volver  para cuando la marea bajase,  sería sobre las tres y media de la tarde, pero viendo que nos podríamos quedar sin aparcamiento decidimos comer allí en el restaurante a base de ensalada, raciones de calamares y vieras regados con un buen Albariño.
Cuando terminamos la marea bajó, pusimos pie en aquella maravilla de la naturaleza, rocas, arena, cuevas, playa, un lugar sorprendente, las fotografías no dan crédito a la vivencia que pasamos en aquella playa, si digo: es lo mas impresionante que he visto en muchos años me quedo corto.
Es un monumento natural digno para proteger, hay una cueva donde llegan las personas, depositan un recuerdo de su estancia, lo encuentro inadecuado aunque sea una piedra rompe con todo, tendrá que estar virgen.
Empapados pantalones y pies, volvimos al coche comentando toda esta belleza, emprendiendo el viaje hacia A Coruña, quizás el peor hotel, lejos del centro, una vez  alojados partimos en taxi en tres minutos hacia el centro, llegada a plaza de María Pita, visita a pie por la ciudad, muy buen ambiente se respiraba allí, pero las inclemencias del tiempo nos hicieron refugiarnos en un bar para realizar la cena, tomarnos el pulpo, los mejillones de rigor, cabe destacar la cantidad de agua caída y después la gran calma para despedir el día tomándonos un café en la plaza para regresar al hotel.
Capítulo 4 Con agua y sin cartera
La mañana desayuno en hotel con croisán,  nos auguraba un mal día como así ocurrió, de todo, en primer lugar visitamos la torre de Hércules con alguna llovizna y entre risas y fotos, la verdad estábamos mas solos que la una, salimos hacia Cambados, donde estuvimos en el mercado, fotografiando el pescado de distintos tipos hasta las enormes hogazas de pan.
Después buscamos la oficina de turismo,  a veces me pregunto su funcionalidad,  nosotros apenas hacemos caso, por la visita relámpago como la lluvia atronadora que nos cayó donde nos tuvimos que refugiar urgentemente en un bar para tomarnos un Albariño,  pasamos previamente por la feria de la vieras, eran caras no hicimos caso alguno.
Una vez calmada la tormenta partimos a comer hacia O Grove, mi cuñao siempre me comenta: en los viajes siempre te dan alguna estocada, aquí fue, la verdad fuimos como borregos al redil,  aquello parecía un buen lugar para tomar una mariscada, nos hicieron un buena entrada como a los toreros después de una gran faena en este caso era visitar los viveros, ver el marisco.. y después una buena presentación de dos fuentes de marisco, en el fondo todo era congelado, lo único fresco eran los mejillones, calidad precio un insuficiente a la mariscada, por mi parte, ignoro la del resto.
Para digerir la comida estaba cerca la isla de La Toja,
una buena visita a su Iglesia de conchas y camino hacia el hotel Trip de Santiago de Compostela, aquí fue donde a la llegada después de dar las tarjetas del hotel me encuentro que no llevo la cartera, bajo como un desesperado buscando la misma en el coche, en la recepción, en la calle, en fin pasé quince minutos malísimos, en realidad se encontraba en un lateral del asento del coche junto al copiloto, ¿de quién es la culpa? Vaya usted a saber.... lo pasamos todos muy mal.
Una vez finalizado el suceso cogimos un taxi, nos encaminamos hacia Santiago de Compostela, lo primero llegar a la catedral y abrazar al Santo, después  pateando sus calles peatonales para descansar y tomarnos una Estrella de Galicia donde invité con el mayor agradecimiento del mundo, me supo a gloria por la dichosa cartera, volvimos a dar otra vuelta y entre pitos y flautas llega la hora de la cena, volvimos a visitar una taberna que el año anterior habíamos estado allí, pulpo, pimientos de Padrón, Albariño...entre otras  hicieron deleitarnos y olvidar lo pasado durante este día.
Capítulo 5 ¡Ostras el carril bus!
Esta vez no desayunamos cerca del hotel sino buscar una ruta turistica sin autopista por los pueblos de Galicia para llegar a Vigo, al principio buscando gasolinera topamos con un bar, después llovizna, niebla, poblados, un paisaje para ver, descubrir, con poco tráfico, circulando con prudencia se va muy bien, siempre respetando las señales.
Desde aquí envío un mensaje para que se respeten las señales de tráfico en todas las carreteras, no por ello a mi llegada a Vigo tuve un error garrafal, me metí cien metros en carril bus, era domingo no tenía mas remedio, pero no deja de ser un error por mi parte....
Una vez aparcado el coche nos fuimos al paseo Marítimo y puerto, visitando la zona centro de Vigo, apenas había gente al ser domingo, el turismo era escaso, los buscadores de gente para los restaurantes se hacían la competencia para conseguir comensales uno de ellos Juan el polaco nos cogió par poder tomarnos unas ostras,  fue lo mas destacado. En Vigo compramos vino Albariño y poco más. El regreso lo hicimos en autopista porque nos urgía volver de nuevo a Santiago, visitar los lugares del día anterior, cuarta vez que voy a Santiago para mi tiene algo especial, no me canso de ir allí, repetimos cena en Obarril y casi nos cierran la puerta del parking a las once de la noche, descanso y hotel.






Capítulo 6 De las murallas a la noche cervantina
Salimos temprano camino para Lugo, desayuno bastante tarde porque no hay muchos lugares donde parar, carretera bastante transitada hasta llegar a la muralla de Lugo, bonita ciudad, 
Rn esta fechas seguía con la huelga de basura, pero en la zona amurallada estaba bastante limpia, por eso del turismo, bonita y grandiosa catedral,
gran plaza central y excelentes murallas para realizar un paseo soleado, esta vez la lluvia nos dejó en paz.
 Tras bajar de las murallas nos acercamos al comercio donde realizamos las últimas compras vinatera y queseras,después buscar las viandas, satisfacer nuestros estómagos con unas exquisitas y sabrosas zamburiñas entre otros
manjares de Lugo.
La tarde me deparaba un largo recorrido hasta llegar a Alcalá de Henares, nos sorprendíó el hostal Bari por su vistas exteriores, pero ocurrió algo sorprendente,  primero tuvimos que pagar antes de ver las habitaciones y después el hostal estaba totalmente reformado un diez en calidad precio para el hostal, aunque se encuentra a unos veinte minutos del centro pero fue lo suficiente para visitar la ciudad.
 No me esperaba lo bonito y maravilloso que eran sus fachadas de las Universidades, así como el paseo por su calle Mayor, que preciosidad, un lugar excelente no para estar unas cuantas horas sino para visitarlo mas a conciencia, tras quedarnos con el plano de la situación tomamos un refrigerio en la "Cuadra de Rocinante" mención especial es su queso manchego, esta noche cervantina nos dejaría a las puertas de la casa de Cervantes que al siguiente día visitariamos

Capítulo 7 La despedida
Era 22 de julio y estaba ya todo cantado, tras el desayuno, no aconsejo tomar en el hostal Bari, emprendimos de nuevo la visita en Alcalá, paseamos por los mismos lugares de la noche anterior pero con otra ilumninación, el calor se hace notar en esta zona,  tras unas cuantas horas de estar viendo Alcalá y sus monumentales fachadas, Universidades museos y murallas, emprendimos el camino de regreso, Con unas paradas para comer y tomar algún refrigerio, llegamos sobre las seis de la tarde a Almería, en la puerta de casa de mis cuñados nos dimos un gran abrazo los cuatro en señal de  los momentos felices vividos durante estos días de convivencia tanto de camino, carretera y hotel.
Epílogo la queimada
El día 24 de julio nuestros cuñados tuvieron la amabilidad de invitarnos a celebrar su aniversario de bodas, en realidad era el veintitrés pero por reunir a todo el personal se celebró durante esta fecha, tras una copiosa comida regada con Albariño y quesos manchegos entre otros la noche terminó con una gran queimada como recuerdo nostálgico de nuestro paso por Galicia.
POSDATA Quedáis emplazados para realizar el año próximo la ruta a Bilbao y demás.......



1 comentario:

celeste_neruda dijo...

Muy buenas Antonio,he seguido tu camini con gran expectación... Al llegar al capitulo 4º "...entre pitos y flautas la hora de la cena en la taberna del año pasado..." Como me he acordado, compañero, de ese camino... Recuerdo que en esa taberna os hice unas foto... Tu frente a una buena ración de pulpo... AAAH!! la POSDATA me ha gustado: Ruta Bilbao y demás... No quisiera perder el contacto con vosotros... Hasta podría ir si lo hablamos... "ME GUSTA TANTO VUESTRO DISFRUTE". UN FORTÍSIMO ABRAZO A LOS DOS!!¡¡